dissabte

kassel no invita a la lógica (enrique vila-matas)

Callé, pero no fue un silencio embarazoso porque, cuando dos personas caminan y conversan, los silencios no llegan a ser nunca tensos ni violentos ni graves.

A la larga, pensé, acabo uno descubriendo que cuidar de modo productivo los asuntos particulares es lo más importante del mundo.

Una vez más, volví a decirme que la escritura nacía de ese espíritu de la escalera y era en el fondo la historia de una larga venganza, el dilatado relato de cómo poner por escrito lo que en su momento deberíamos haber puesto en la vida. 

Me acordé de que Chesterton decía que había una cosa que daba esplendor a cuanto existía, y era la ilusión de encontrar algo a la vuelta de la esquina.

-¿El mundo? No, sólo el arte.
-¿Por qué?
-Porque intensifica el sentimiento de estar vivo.

Comprobé una vez más esa gran verdad que dice que necesitamos percibir que somos vistos por alguien, pues lo contrario es insufrible.